Clases de Canto | Escuela de Canto

A pesar de que esta película fue realizada para niños, la mayoría de las personas que conozco que la han visto y que les encanta son gente adulta, y me considero parte de ellos a mucha honra. Es una de las películas que más me gusta y me divierten con relación a las clases de canto y de música en general. Para los que no la han visto se las recomiendo ampliamente y ahora les explicaré por qué. En principio, a mí me encanta la actuación del gran actor cómico Jack Black. Es divertida y expresa lo que muchos, muchos de nosotros hubiéramos querido tener o hacer alguna vez cuando fuimos niños y estuvimos en la escuela, ya que es un maestro, que en realidad no es maestro, pero que al tener que dar clases en una escuela primaria y no saber qué hacer, decide que los niños del salón sólo tomarán clases de música porque es lo único que les puede explicar. Les aseguro que en el transcurso de la historia se divertirán mucho y también aprenderán. Espero que les guste.

Cuando vi la película por primera vez en MTV me encantó, pues desde el principio me identifiqué en gran medida con el personaje de Jack Black. No olvido la primera escena en la cual está tocando en un bar con su banda (él es el guitarrista) mientras toda la gente está apagada y sin ganas de rockear. Sin embargo, él está en su mundo e incluso parece que está drogado de tanta energía que le imprime a su interpretación. Lo malo es que nadie más que él tiene esa energía y todos lo ven raro. Pero a él no le importa, pues la música y el rock están en su alma, siendo que incluso se avienta a la gente para que lo carguen como en un concierto masivo y todos se abren dejando que caiga como costal al piso. Es muy divertido, pero lo interesante es que es una gran inspiración para quien quiere ser músico o cantante.

Cuando doy clases de canto mucha gente piensa que lo más importante de todo es la respiración, el uso del diafragma, cantar agudo, tener vibrato, etc., pero Jack Black nos muestra lo que en realidad importa, y es lo que sientes, lo que comunicas cuando estás cantando o tocando. A él no le importa la técnica, no le importa lo que dirán de él, sólo le interesa tocar para expresar lo que quiere decir al mundo, y eso en realidad es la clase más difícil e importante de todas cuando se estudia música o canto. Hay un millón de personas que cantan o tocan algún instrumento muy bien, pero la diferencia entre todas esas personas es que sólo tendrá éxito el que en verdad comunica algo, el que lo siente en su alma y en sus venas, el que se divierte con lo que hace y vive desde lo más profundo de él lo que está haciendo.

Cada vez que voy a escuchar a alguna banda, que generalmente es en concursos de bandas de rock, me invitan para que juzgue o dé mi punto de vista para retroalimentación de los que están en el escenario. Muchas veces cantan muy bien, los músicos tocan bien, pero no se siente lo que desean expresar. Toda la banda está tocando rock y nadie se mueve. Incluso traen vestuarios como si acabaran de ir a la plaza comercial y luego al concierto. En ese momento me dan ganas de gritarles y decirles que eso no es un rockero de corazón. Si son rockeros tienen que ser libres, agresivos, hacer ruido, tocar los instrumentos con fuerza, con actitud y energía, usar vestuarios que los identifiquen como lo que son, pero a la vez que impongan moda si quieren ser parte de una industria musical.

Son muchas las cosas que se deben tomar en cuenta cuando se hace una banda o cuando se pertenece a una. Pero lo más importante de un artista es su espíritu. Aunque mi papá cantara mejor que Axl Rose de Guns N´ Roses, les juro que jamás sería igual porque no me imagino a mi papá bailando como él, tirándose al piso como él, usando falda en el escenario, dejándose el pelo largo, abriendo los brazos sintiendo el éxtasis de la canción y un sinfín de cosas que lo hacen ser el increíble Axl Rose. No es sólo tener una buena técnica y cantar. Como les comentaba en otros blogs, por supuesto que eso nos hace mucho mejores, durar más tiempo cantando sin lastimarnos, hacerlo cada vez mejor, etc., pero nada de eso servirá sino nos entregamos al 100% en vivir nuestro sueño.

Hace unos años vi a una banda en donde el bajista llegaba de trabajar de la oficina y prácticamente así se subió al escenario. Ya se imaginarán al señor con peinado de raya y gel, pantalón Dockers y camisa de vestir de cuadros. Imagínense eso tocando a AC/DC o a Metallica. No lo podía creer. Pero a lo que voy con esta película es que como adultos los hará volver a creer en sus sueños, en que se pueden divertir cuando cantan o tocan un instrumento. Y a cómo se forma una banda si es que quieren hacer una. Me encanta cuando Jack Black los divide en la clase y elige quién será el guitarrista, el baterista, las coristas, los de los efectos e iluminación y hasta las presidentas del club de fans. Pues a cada uno le encuentra las habilidades para lo que es bueno y crea algo increíble. Les transmite la pasión por la música, tanto que los papás de los niños comienzan a preocuparse porque en algún momento puedan querer dedicarse a eso profesionalmente cuando crezcan.

Y dentro de la película escucharán muchas frases e historia que no es inventada, como cuando el maestro les deja estudiar y escuchar ciertos discos para que aprendan de los mejores, como al baterista el disco de Rush para que escuche los solos de lo que para muchos es el mejor baterista de todos los tiempos, Neil Peart. O el sólo de voz que hace la cantante de sesión Claire Torry en la canción “Great gig in the sky” del disco posiblemente más importante de todos los tiempos para los que saben de música, “Dark side of the moon” the Pink Floyd (la revista Rolling Stone lo nombró como el mejor disco de todos los tiempos, lo cual no significa que sea el más vendido). Toda esa información es fantástica, puesto que son bandas y/o cantantes legendarios que pocos jóvenes conocen el día de hoy. Tal vez es mi manera de pensar, pero no concibo a un guitarrista aunque sea joven que no conozca al grupo Pink Floyd, o un baterista a Rush, o un cantante a Steve Perry. Es como estudiar Historia y no conocer a Hittler.

Escuchen la filosofía que tiene el personaje de Jack Black y a pesar de que sabemos que nunca tomaremos clases así o que nuestro hijos nunca las tendrán, es una buena película para reflexionar sobre lo divertido que es la música y el porqué nos gusta. Además como dato cultural, para escoger a los niños de la película, Disney tuvo que hacerle audiciones a miles de niños que tocaran en realidad los instrumentos, por lo que todos los niños sí son músicos y son ellos los que tocan o cantan en realidad. No les digo más para que la vean en familia y se pasen un buen día musical.

Les deseo que tengan un increíble día y que reflexionen cuánto espíritu tienen por la música y el canto. ¿En verdad es suficiente? ¿En verdad transmiten algo cuando cantan? Respóndanse a esa y a otras preguntas y créanme que encontrarán cosas que jamás imaginaron que existían en ustedes.

Eddie Robson – IVT President